La enorme dureza de algunos pronunciamientos, como los agitados por el ex Presidente Aznar, y el énfasis desmedido en cuestiones tan poco municipales como el terrorismo y la política internacional, hacen que a muchos electores moderados del PP les resulte difícil depositar un voto de convicción. De la misma manera, algunos movimientos políticos y estratégicos también han podido suscitar desorientación y distanciamientos entre diversos sectores del electorado. Por lo que, al final, va a ser difícil saber cuáles serán los niveles de abstención y de voto crítico (blanco y nulo), o cuáles serán los apoyos diferenciados que obtendrán unos y otros candidatos concretos, según los perfiles político-ideológicos que proyectan públicamente.
Lo que sí puede asegurarse con bastante certeza es que los resultados van a ser objeto, desde el primer momento, de múltiples presentaciones interesadas. Máxime teniendo en cuenta los movimientos políticos –más o menos soterrados– que en el sentido de esta serie de análisis se han empezado a producir en el curso de la campaña.
Por lo tanto, aquellos que quieran fraguarse sus propias conclusiones sobre los resultados de las elecciones harían bien en seguir directamente el recuento en la propia web del (Ministerio del Interior ) y, luego, si lo desean, dedicarse a comparar las distintas presentaciones que se hacen de los mismos datos, desde unas y otras ópticas y plataformas digitales y/o impresos.