Sin embargo, la paradoja es que la existencia de este eventual partido de centro ofrecería más posibilidades que las actuales para formar coalición de gobierno, sin depender de los partidos nacionalistas, llevando a que las coaliciones basculen más hacia el centro. Si el partido de centro llega a superar la barrera del 10%, lo cual hoy por hoy parece muy probable -prestemos atención a Francia-, entonces podría tener una representación parlamentaria importante, hasta llegar a convertirse en una pieza imprescindible para la formación de mayorías estables.
En segundo lugar, la potencialidad electoral del centro no sólo haría bascular de nuevo la dinámica política española en torno al centro organizado, sino que también obligaría a los dos grandes partidos a cuidar más a los electores de centro, si no quieren retroceder. Es decir, esta posibilidad forzaría una mayor moderación en los planteamientos políticos y una mayor templanza en los discursos políticos, amortiguando los actuales riesgos de crispación.
En tercer lugar, la presencia de un partido político de centro quitaría bastante protagonismo, y potencialidad, a los partidos nacionalistas, que ya no resultarían tan imprescindibles para la gobernabilidad de España y, en consecuencia, se verían también forzados a templar sus posiciones y a ajustarse a planteamientos más asimilables para todos; lo cual equilibraría más su peso político en relación a su fuerza electoral real.
En cuarto lugar, sin agotar la cuestión, la existencia de un partido de centro permitiría traducir mejor y más fielmente las orientaciones ideológicas de la opinión pública, de forma que bastantes personas podrían tener el convencimiento de que nuestro sistema político es suficientemente representativo y que sus opiniones cuentan realmente en la vida política española. Es decir, la democracia española ganaría en credibilidad y en eficacia representativa.
En cualquier caso, la clave de muchas de estas reflexiones y análisis está en saber hasta qué punto es posible que un eventual partido de centro obtenga inicialmente unos apoyos electorales por encima del 10%. De eso me ocuparé la próxima semana.