La actual dinámica social y económica está dando lugar a un aumento de la pobreza y a un debilitamiento de los lazos sociales, en un contexto global de crecientes desigualdades sociales, donde los más ricos son cada vez más ricos y los más pobres cada vez más pobres. Según la lista Forbes 2011, las personas cuya fortuna supera los mil millones de dólares han aumentado de manera espectacular durante los dos últimos años de crisis, mientras su fortuna conjunta se ha duplicado prácticamente, hasta llegar a los cuatro billones y medio de dólares.

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