El principal partido de la oposición continúa en su campaña de face news para desprestigiar al Centro de Investigaciones Sociológicas. La falsedad que pretenden imponer la basan en dos argumentos, que por más que repitan no se creen ni ellos. El primero, es que el CIS nunca “acierta” en sus encuestas electorales. Y el segundo, que las estimaciones de voto no son ciertas.

En cuanto al primer argumento, los estudios electorales realizados por el CIS desde 2018, en elecciones autonómicas y generales, han mostrado que partido político ganaría las elecciones en 22 de los 23 procesos electorales que se han producido en España. Solo en Castilla y León 2022 se estimó un empate técnico entre PSOE y PP, con el PSOE como primera fuerza, y finalmente fue el PP por muy estrecho margen. Esto significa que el Centro de Investigaciones Sociológicas, en lenguaje llano, acierta.

En cuanto al segundo argumento, que consiste en decir que todas las estimaciones del CIS son falsas, tanto en la etapa de Casado como ahora de Feijóo, y ciertas las que hacen otras empresas privadas que dan ganador al PP, se puede señalar que si las estimaciones electorales que hizo el CIS hubieran sido erróneas estaría gobernando el PP y no el PSOE. O, que, si Casado iba tan bien, como decían todas las casas privadas de encuestas menos el CIS, ¿Por qué lo echaron si solo tenían que esperar a que llegaran las elecciones para estar en la Moncloa?

A pesar de la campaña, me quiero centrar en que el CIS publica todos los datos y también el modelo de estimación, para que cualquier ciudadano o científico pueda utilizarlos para hacer sus propios análisis o ver como se han realizado las estimaciones, algo que no hacen las empresas privadas. Y aquí, parece que el PP, que tanto critica al CIS, se da cuenta que lo del cuento de Blancanieves, y la bruja con su “espejito, espejito, ¿quién es la más bella del reino?, no les está funcionando. Por mucho dopaje de encuesta que reciba de “compañías privadas”.

Varios ejemplos así lo constatan.

Primer ejemplo. Cuando a los ciudadanos se les pregunta ¿qué partido considera más cercano a sus propias ideas? El PSOE es el partido político que los españoles consideran más cercano a sus ideas. Y la diferencia entre PSOE y PP, desde que Feijóo es presidente del Partido Popular, ha aumentado. Concretamente, de 5,9 puntos porcentuales de diferencia en abril de 2022 a 7,1 puntos porcentuales en octubre de 2022, según los barómetros del CIS de esos meses.

Segundo ejemplo. El PP tiene un problema electoral en varias comunidades autónomas que ellos saben que lastra mucho sus posibilidades electorales en unas elecciones generales. Pero no solo tiene un problema en numerosas zonas de España, también lo tienen en distintos sectores de la población, como señala el CIS y ellos saben. De ahí, el acto conjunto celebrado recientemente con jóvenes de Ayuso y Feijóo.

El PP tiene problemas de voto con los jóvenes. En el barómetro del CIS del mes de octubre de 2022, cuando se hace la pregunta de qué suponiendo que mañana se celebrasen elecciones generales ¿A qué partido votaría? Solo el 13,2 por ciento de los jóvenes de entre 18 a 24 años dice que votaría al PP, mientras un 20 por ciento dice que votaría al PSOE. En el tramo de 25 a 34 años, un 16,9 por ciento señala que votaría al PP y un 18,2 por ciento al PSOE.

Lo que está por ver es si da votos ir a un acto con jóvenes y decirles que “les falta esa cultura del esfuerzo que se ha ido perdiendo por muchas cuestiones”. O que “la transformación digital, que les está aislando socialmente, les está eliminando el tesón, la paciencia y el relacionarse con otras personas, pero muy por encima de todo está la soledad porque cada vez las familias son más pequeñas, tienen menos aficciones…”.

Pero independientemente de lo anterior, el problema también lo tienen en otros tramos de edad, como el tramo de 55 a 64 años o de 65 a 74 años, donde la diferencia con el PSOE es de 8 puntos porcentuales y 6,3 puntos porcentuales respectivamente.

Volveré con más ejemplos que demuestran porque el PP está por detrás y lo sabe. Pero sería deseable que en este maratón electoral bajara la crispación y la polarización para que los ciudadanos puedan libremente tener toda la información posible que les lleve a decantarse por una u otra fuerza política.

No hacerlo, significará, como dijo Chesterton, que “No es que no puedan ver la solución. Lo que no pueden ver es el problema”.