Carmen Barrios Corredera, Editorial Utopía, 2018

Un libro escrito con mucha pasión, hecho a corazón abierto, que reivindica la lucha, la historia, la rebeldía, pero la mayor reivindicación es la figura de la MUJER (sí, con mayúsculas).

Una vez que empiezas a leerlo ya no hay marcha atrás, te envuelve, te absorbe y cada una de los pequeños relatos van dejando una huella dentro de ti. Imposible quedarse indiferente. Empezando por Rojas, la primera historia, la de Natalia y su Pepona, dolorosa, desgarradora, es toda una declaración de intenciones. La historia, que dura es, recordar momentos vergonzosos de nuestra historia más reciente, historias de familias rotas, humilladas, traicionadas, asesinadas. El libro nos lleva a la injusticia de la historia con el papel de las mujeres, comenzando en la lucha contra el franquismo, los maridos dentro de la cárcel, pero, ¿y las mujeres que estaban fuera? Esa imagen patriarcal, machista de pensar que los únicos que lo tenían difícil eran los hombres que estaban en la cárcel (de lo que no se duda) y que las mujeres que estaban fuera estaban mucho mejor. Total, solo se tenían que hacerse cargo de los niños (en el más amplio sentido de la palabra) de recorrer las distintas cárceles para ir a verlos y llevarles aquello que podían y les dejaban, y aun, les quedaba tiempo para luchar por la libertad y contra el régimen franquista.

Mujeres que se olvidaban de que eran mujeres “porque la sociedad les decía que tenían que hacer, ser madres y esposas” ¿y ser mujeres? Señala la autora la crudeza de la época más negra de España, donde las protagonistas son mujeres, guerreras, olvidadas, desdeñadas, maltratadas y sobre todo ninguneadas. Mujeres con nombres propios, Natalia, Dulcinea, Ilenka, Anita, Tina, y sobre todo Manuela, la reina maga, pero como se dice en el texto, una de verdad, todas deberíamos tener la suerte de estar cerca de una, alguien que te despierte, que te abra los ojos, que te enseñe a reivindicar, a luchar y sobre todo que te eduque en el inconformismo, en la rebelión ante lo estipulado, ante lo que se considera “normal”, que te enseñe a no tener miedo a romper las normas, Manuela Corredera murió como vivió, luchando por sus ideas. Algunos somos afortunados de tener a personas cercanas así, que nos regalan día a día su sabiduría.

Violetas es una parte brillante del libro, dice sin decir, abre los ojos de los lectores sin apenas darte cuenta, y de una manera muy sutil te pone de frente al espejo de la sociedad actual, sin necesidad de explicar nada. Problemas que viven las mujeres del SXXI que no son muy distintos de los que sufrían ya en el SXX, la soledad, el maltrato, la ignorancia…. Relatos duros, muy duros que hacen pensar, ¡porque este libro desde luego que invita a pensar!, relatos tan duros como el de “Menudo pájaro”, ¡que dureza! Y qué manera de contar una verdad.

El libro termina con las Espartanas, mujeres luchadoras. Luchan para defender los derechos de hombres y mujeres, niños, ancianos, discapacitados, etc. Grupos de mujeres que se defienden del trabajo precario como las Kellys, la explotación de los mensajeros, de los recortes en la educación, en la sanidad… En resumen, que reivindican la lucha colectiva en la consecución de beneficios generales, de ayuda al que menos tiene, la lucha por la IGUALDAD, en todos los sentidos.

En definitiva, un libro que una vez que lo empieces tu cabeza empezará a pensar, a reflexionar y tener puntos de vista diferentes. Aunque pudiera parecer que por la temática está orientado a la lectura femenina, nada más lejos de la realidad. Recomendado para mujeres y hombres que quieran cambiar y mejorar la realidad que nos rodea.

 

* Rojas, Violetas y Espartanas. Mujeres en lucha se presenta el miércoles 14 de noviembre a las 19h en la sala Trece Rosas de CCOO Madrid (Lope de Vega, 38).